Damos por hecho muchas cosas y una de ellas que estaremos SANOS siempre y sin necesidad de cuidarnos.
Muchas veces pensamos en trabajar duro, realizar muchas tareas, ser muy activo, poder dar la talla en muchas actividades, pero se nos olvida que, para lograr todo esto debemos primero cuidar nuestra salud. Por otro lado si somos deportistas o nos consideramos serlo, nos dedicamos a entrenar duro, haciendo series muy fuertes, a mucha intensidad y realizando entrenamientos de largas distancias, pero se nos olvida igualmente lo más importante, lo verdaderamente importante es nuestra salud.
Sin salud no podemos trabajar, no podemos sentirnos bien, no podemos proveer a nuestra familia ni a nosotros mismos de un ingreso que nos permita vivir como deseamos.
De nuestra salud depende nuestro estado de ánimo, nuestro deseo de trabajar, de realizar actividades, nuestras fuerzas físicas y mentales; es por eso que la salud es la llave de nuestro éxito.
No nos compliquemos no se trata de realizar cantidades extenuantes de ejercicio, basta y es suficiente para mantenernos lo más sano posibles;
Caminar al menos 4 veces a la semana por lapsos de más de 30 minutos o bien combinar trote – caminata rápida. Si podemos es mejor combinar el trote y la caminata, haciendo unos 3 minutos de caminata por 2 minutos de trote hasta cumplir 30 minutos.
Cuando hablamos de salud no sólo nos debemos referirnos a la salud física, sino también a la salud mental. La mente es por lo general lo que menos trabajamos, es el aspecto que más descuidamos, lo que no sabemos es que tanto para nuestra vida profesional como personal, entre el 30 al 35% de los resultados que obtendremos dependen de nuestra preparación y estado mental. Por eso, cuidemos nuestra salud física y también nuestra salud mental.
Y por favor hagamos caso a las pequeñas señales de nuestro cuerpo, esos avisos que recibimos, que en ocasiones parecieran normales, como dolores en diversas zonas de la espalda, plantas de los pies, sudoración excesiva, dolores de cabeza, etc, que muchas ocasiones obviamos pensamos que son normales de cansancio de nuestras actividades diarias, pero no lo son avisos pequeños que tristemente en algún momento dejarán de ser avisos pequeños para convertirse en problemas más graves o en nuestro último respiro.
La medicina ha avanzado muchísimo, muchas veces traemos ya carga genética que de antemano nos podrá poner en predisposición de una diversidad de enfermedades, y si no nos cuidamos brotarán más rápidamente, por lo que no dudemos en realizarnos chequeos y exámenes médicos constantemente, unas pastillitas pueden hacer una gran diferencia contra una serie de fallas que pudiéramos tener y nos traerán un cambio significativo en nuestro aprovechamiento físico.
VAMOS A MOVERNOS y evitemos los excesos.