El canto del cenzontle – Ruiseñor.

por chamlaty

El canto del cenzontle, una preciosa leyenda mexicana

Cuando los dioses terminaron de crear todo el mundo, el Señor de los montes llamó a los pájaros. Y todos obedecieron.

En seguida el cielo se llenó de pájaros de todos los colores. Algunos, negros, otros con vistosas plumas.

Había pájaros de vuelo elegante y rápido y otros de alas pequeñas que eran capaces de sostenerse en el mismo sitio en equilibrio. Pájaros veloces y otros más ágiles cerca del suelo. Pero ninguno emitía ningún sonido.

El Señor del monte les ordenó formar en fila, y todos obedecieron de nuevo. Una vez que estuvieron todos frente al él, les dijo:

– Bien, os he llamado porque debo daros a cada uno un canto diferente. Tú, canario, cantarás de forma melodiosa…

Y el canario se fue muy contento, cantando sin parar.

– Y tú, jilguero, tendrás un canto dulce…

Así, cada uno de los pájaros fue recibiendo una voz, un sonido particular. El gorrión, el cóndor, la golondrina… Pero faltaba un pájaro, el despistado cenzontle, que se había entretenido buscando comida.

El pequeño pájaro de pronto se dio cuenta de que estaba muy solo. No vio a ningún compañero cerca y recordó que el Señor de los montes les había llamado, pero cuando llegó, él ya había terminado y se alejaba.

– ¡Espera! ¡Señor de los montes! ¡Falto yo! ¿Qué sonido me darás?

– ¿Y tú dónde estabas?- dijo asombrado el Señor de los montes- Ya les di a todos un sonido…

No sé qué canto darte a ti… Bueno, está bien, ya lo tengo. Tú los tendrás todos. Cantarás como todos. Podrás elegir el que más te apetezca cuando lo desees.

Y así es cómo el cenzontle, un pequeño y sencillo pájaro de plumas gris, es capaz de imitar el sonido de más de cuatrocientos pájaros.

 

www.actualizandome.com

Te podría interesar