Las montañas Taihang y Wangwu tienen unos 700 kilómetros de contorno y 10.000 kilómetros de altura.
Al norte de estos montes vivía un anciano de unos 90 años de edad al que llamaban El Viejo. Su casa miraba hacia estas montañas y debido a su avanzada edad él encontraba bastante incómodo tener que dar un largo rodeo cada vez que salía o regresaba a casa. De manera que un día tuvo una gran idea, y decidió reunir a su familia para discutir el asunto.
– ¿Qué les parece si todos juntos desmontásemos las montañas para crear un camino? – sugirió –. Entonces podríamos abrir un camino directo hacia el Sur, hasta la orilla del río Hanshui.
Toda la familia estuvo de acuerdo, excepto su mujer, que dudaba.
– No tenemos la fuerza necesaria para desmontar las montañas – dijo –. ¿Cómo podremos cambiar la silueta esas dos montañas? Además, ¿dónde vamos a vaciar toda la tierra y los peñascos?
– Los vaciaremos en el mar – fue la respuesta.
Entonces El Viejo partió con sus hijos y nietos a remover las montañas. Tres de ellos llevaban balancines y removieron piedras y tierra y, en canastos, los acarrearon al mar. En cada viaje tardaban varios meses.
Un hombre que vivía cerca de la orilla del río, a quien llamaban El Sabio, se reía de sus esfuerzos y trató de disuadirlos.
– ¡Basta de esta tontería! – exclamaba –. ¡Qué estúpido es todo esto! Tan viejo y débil como es usted no será capaz de arrancar ni un puñado de hierbas en esas montañas. ¿Cómo va a remover tierras y piedras en tal cantidad?
El Viejo exhaló un largo suspiro.
– ¡Qué torpe es usted! – le dijo –. Aunque yo muera, quedarán mis hijos y los hijos de mis hijos; y así sucesivamente, de generación en generación. Y como estas montañas no crecen, ¿por qué no vamos a ser capaces de terminar por removerlas?
Entonces El Sabio no tuvo nada que responder.
3 Comentarios
Entonces el sabio no tuvo nada que responder.
Jajajajajajajajaja
Es interesante, la mayoría tratamos de seguir avanzando el camino de nuestros antepasados y debemos seguir dando el ejemplo a nuestros hijos o familiares, a seguir moviendo montañas estimado.