«Conquistaré aquello que no ha sido conquistado. La derrota no va a estar en mi credo. Creeré con certeza cuando todos aquellos que han venido antes que yo han dudado. Me esforzaré siempre por mantener el prestigio, el honor y el respeto de mi equipo. He entrenado mi mente y ahora mi cuerpo le seguirá.
¿QUIÉN SOY YO?…
¡YO SOY UN CAMPEÓN!
Reconoceré el hecho de que soy un guerrero privilegiado que llega a la delantera de la batalla por cualquier medio que esté a mi alcance. Acepto el hecho de que mi equipo espera que avance más lejos, más rápido y que vaya a luchar con mayor fuerza que mis oponentes. Jamás abandonaré a mis compañeros. Me mantendré siempre alerta, físicamente fuerte, moralmente recto, y asumiré más que mi parte de la tarea, sea la que sea. ¡Al cien por cien y más!
¿QUIÉN SOY YO?…
¡YO SOY UN CAMPEÓN!
Galantemente voy a enseñar al mundo que soy un guerrero bien entrenado y especialmente seleccionado. Mi corazón y mi alma serán el combustible que llevarán a mi cuerpo cuando mis piernas estén cansadas. Jamás vacilaré, jamás perderé mi concentración mientras haya esperanza en mi mente y mi corazón siga latiendo. Nunca cederé ante ese mal que es la debilidad, y lucharé contra este mal con mi último aliento.
¿QUIÉN SOY YO?…
¡YO SOY UN CAMPEÓN!
Con energía me enfrentaré a mis enemigos, nadie me retará, nadie me apartará de mi objetivo. Les venceré en el campo de batalla ya que estoy mejor capacitado y lucharé con todas mis fuerzas. La rendición no es la palabra de un Campeón. Nunca dejaré que un compañero hundido caiga en las manos de mi enemigo, y bajo ninguna circunstancia me rendiré jamás.
¿QUIÉN SOY YO?…
¡YO SOY UN CAMPEÓN!
Mostraré fácilmente la disciplina y las fuerzas necesarias para luchar hasta lograr mi cometido y voy a completar mi misión. Me levantaré cada vez que me caiga. Arrancaré el corazón de mi enemigo y lo dejaré palpitando en el suelo. Mi enemigo no tiene por qué temerme, pero me va a respetar. Y si no lo hace, lograré que me respete con todo lo que yo tengo para ofrecer.
¿QUIÉN SOY YO?…
¡YO SOY UN CAMPEÓN!
La historia recordará mi nombre y no tendrá que ser amable, porque me habré negado a sus críticas y habré puesto yo mi propia alabanza. Nadie me va a definir, nadie va a decirme lo que puedo lograr, nadie podrá decir que no he dado todo lo que tengo, y nadie se va a llevar mi Gloria.
¿QUIÉN SOY YO?…
¡YO SOY UN CAMPEÓN!”
Entrenador Flowers del instituto de Leland FOOTBALL.
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