Una vez estaba alojado en un hotel, esperando en un cuarto del segundo piso para abordar un buque de vapor con destino a Kyoto. En el cuarto de al lado había un comerciante que contaba con el ábaco y anotaba. La camarera llamó, «el buque está por marcharse». En cuanto el comerciante oyó la llamada de abordar, puso el ábaco y el cuaderno en su maleta dirigiéndose al barco, al cual fuí también.
Resultó que nosotros éramos pasajeros en la misma cabina. Cuando el entró saco de inmediato su ábaco y cuaderno de la maleta, retomando sus cálculos. Quede sorprendido de su planificación y reflexioné; si cuando la camarera llamo para tomar el barco él hubiera pensado «estoy ocupado ahora abordaré al terminar mis cálculos» el posiblemente hubiera perdido la oportunidad de tomar el barco.
En el tiempo de abordar nosotros deberíamos obedecer el llamado. Una vez en el barco, nosotros deberíamos continuar con nuestro trabajo. Ello es un método sabio. A veces aconsejo a mis amigos que oigan el BUDA-DHARMA, por lo general contestan que están ocupados en asuntos mundanos o son demasiado jóvenes y no tienen tiempo de oírlo. Ellos no conocen acerca del viento de la IMPERMANENCIA.