El libro, según explica Gary, está dedicado a todos los profesionales que se sienten atrapados como un hamster corriendo en una rueda. Saben que no se pueden bajar de ella porque perderían los beneficios que han conseguido, pero están conscientes de que esa rutina nunca los llevará a vivir el sueño de su vida.
La solución, de acuerdo a Gary, radica en las conversaciones que tenemos, pero sobre todo en las que tenemos con nosotros mismos. Todo lo que pensamos influye directamente en nuestros sentimientos y acciones, y en consecuencia, en lo que conseguimos.
4 enseñanzas de “Deja de joderte la vida” . Preocúpate menos, vive más”, de Gary John Bishop
1.- Tienes que estar dispuesto y debes programarte para ganar
Todos tenemos problemas en la vida. Una mala relación, un trabajo nocivo, malas inversiones, etc., la lista puede ser interminable. Siempre puedes culpar a alguien más o culparte a ti mismo, es igual, ambas son igual de inútiles. Para lo único que sirven es para perder el tiempo y agregar estrés a tu día a día.
Sí, puede ser incómodo, pero si no estás dispuesto a cambiar, tienes la vida que quieres tener. Porque tú eres responsable al 100% de lo que haces con tu vida.
Imagínate qué pasa cuando haces lo que sea necesario para conseguir la vida que quieres, cuando piensas que en cualquier situación puedes ganar, cuando el poder de la mente te hace cada día más fuerte. Cuando eso pasa, has dejado de joderte a ti mismo.
2.- No tengas miedo a la incertidumbre
Casi todos somos adictos y no lo sabemos, adictos a la seguridad. Nos hemos programado para pensar que la estabilidad es el único camino a la victoria, cuando en realidad la creatividad, la innovación y el éxito nacen de la inseguridad. Nada nuevo se crea a partir de repetir las mismas acciones una y otra vez.
El problema no es fallar cien veces antes de dar en el blanco, el problema es no darte la oportunidad de intentar. Por supuesto, hacer cosas nuevas conduce a imperfecciones, errores y fallos, pero no existe otra manera de aprender y crecer.
3.- Eres lo que haces (no lo que piensas o lo que dices que vas a hacer)
Si tienes una lista de tareas llena de cosas que ya sabes que no vas a hacer, tienes un problema. Piensa que lo que en verdad nos define es lo que hacemos, no lo que pensamos o decimos que queremos hacer.
Una vida exitosa se construye haciendo y no pensando. No esperes sentado a que llegue la inspiración, sal a su encuentro, sacúdete las dudas y empieza construir grandes momentos poco a poco.
Tu seguridad crece en la medida en la que intentas, aprendes y mejoras. Por el contrario, estacionarse en un lugar seguro lo único que fortalece es tu debilidad.
4.- No esperes nada, acepta las cosas como son y te volverás implacable
Si aceptas que no eres responsable de todo lo que pasa en tu camino, pero sí de cómo reaccionas a ello, adquieres los súper poderes que muy pocos logran tener.
Vive el momento, acepta las cosas como son. Cambia lo que no te gusta y ama la vida que tienes, no la que sueñas tener.
NO NOS AUTOSABOTEEMOS¡¡¡¡.
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