Por lo general voy frecuentemente a cierta institución bancaria, en esta ocasión llegué como a la una de la tarde, y generalmente en la entrada del Banco, se encuentra un señor ya bastante grande de edad con su canasto de volovanes para la venta.
Bien esta ocasión llegué al banco, y cual fue mi sorpresa, que nada más veo el canasto de volovanes pero sin su peculiar vendedor. ¡ah caray! Pensé; aquí pasó algo.
Ya entrando a la institución bancaria me doy cuenta que el señor se encontraba adentro del banco y desde ahí le estaba echando un ojo a su venta porque la temperatura rebasaba los 40 grados, porque ante estos intensos calores hay que buscar un buen refugio y que mejor que adentro del banco con climita.
Me quedé observando y los clientes escogían su panecillo y los esperaba adentro para cobrarles.
Solo le falto un letrero que dijera: “ESCOJA SU VOLOVAN Y PAGUE DENTRO DEL BANCO”
@chacemm desde el caluroso y H. Puerto de Veracruz.
2 Comentarios
Abusado el amigo, no se arriesgo a una insolación ;D
TE IMAGINAS con ese gran calorón, el clima estaba aunos pasos,,,,,un saludote.